viernes, 2 de abril de 2010

Totó.

Hace unos días, una alumna me comentaba lo duro que se le estaba haciendo asumir los últimos días de la vida de su perro. Yo, como persona a la que se que escuchan y a la que muchas veces vienen a pedir opinión o a que simplemente los escuchen. Le expliqué que era normal el apego y el hecho de no querer darle la eutanasia, aunque necesario en su caso, así como que la corta duración de la vida de los animales, que nos acompañan es necesaria, comparado con la nuestra, pues al depender de nosotros, sobre todo los perros, no deben durar más que nosotros para que cuando muramos no queden desatendidos.

Pues, sin arrepentirme de lo que le dije, ya que se que le di consuelo y desahogo, ayer me volví a dar cuenta que había mucho de retórica y que, a la hora de aplicármelo, no soy consecuente con lo que le dije.

Ayer recibí la noticia de que el que fue durante mucho tiempo mi perro, Totó, había muerto, por lo que se de manera rápida y poco traumática por una afección del corazón. La noticia me puso enormemente triste y provocó en mi cabeza una avalancha de recuerdos que me quedaré para mi, pero que aún ahora me tiene derrotado y taciturno.

A pesar de todo y de no creer en nada, me queda un consuelo: Totó está jugando ahora con Trosky, el que fue mi perro durante muchos años y que murió hace ya otros tantos, donde quiera que vayan las almas de los perros que nunca he dudado que tengan y que nunca he pensado que se pierdan.

Por eso, y a pesar del dolor, nunca recomendaré a nadie que deje de tener un Totó, un Trosky o cualquiera que sea el nombre por el que vayan a responder sus futuras mascotas, pues, aunque las penas que nos apabullan cuando faltan sean enormes, muchas más son las alegrías y los buenos momentos que nos dan y que sepan esas personas que Totó, Trosky y otros muchos los esperan con ganas de jugar en algún sitio cuando algún día no estén a nuestro lado para darnos juego a nosotros.

sábado, 27 de febrero de 2010

Los valores de la amistad

Entre ayer y hoy, y sin los efectos tan criticados del alcohol como alentador de amistades poco duraderas (o tanto como la deshidratación del cortex permite), he vuelto a dar toda la amistad toda la valía que merece. Y no es que hubiera olvidado el valor de tan importante y, a veces, mal interpretado bien, si no que a veces es necesario un buen baño para eliminar la costra que el día a día van poniendo sobre nuestras estúpidas y sobrevaloradas rutinas.

Hoy se de nuevo que mis amigas están ahí siempre y que no puedo permitir que crean que no estoy cuando me necesitan y cuando no. Que no puedo de dejar de sentir su calor y, si pudiera, no quiero dejar de sentirlo porque las quiero.

Para colmo, hoy he recuperado un amigo que, aunque nunca perdí, hoy ha vuelto, algo que me ha hecho mas feliz si cabe.

Por eso se que yo podría seguir sin mis amigos adelante, si bien ese no seria yo, seria otro muy distinto, y como me costó tanto saber quien soy no pienso derrochar nada mas en buscar a otro con otros amigos pues los míos son sin duda los mejores y me hacen ser tan bueno como soy (que no es poco).

lunes, 15 de febrero de 2010

'Buscando el mar'


Hace varios días que tengo una sensación extraña. Cuando voy por la calle, casi siempre en coche, miro por la ventanilla de una manera diferente. Pero hasta hoy no me he dado cuenta que buscaba mi mar.

Buscaba mi mar al igual que lo hacía Antoine Doinel en Los 400 golpes. Lo buscaba y, como él, sin saberlo. Desde las rejas del reformatorio él miraba hacia fuera sin saber que cerca estaba el mar que tanto quería ver.

Yo espero ver algún día mi mar, sin rejas.

viernes, 18 de diciembre de 2009

Un diálogo.


“ - DORWORTH (BURT LANCASTER): Nada es para siempre, excepto la muerte. Pregúntale a Fierro, a Francisco,… a todos aquellos del cementerio de los hombres sin nombre.
- RAZA (JACK PALANCE).- Todos ellos murieron por un ideal.
- DORWORTH: ¿La revolución?¡Ja! Cuando el tiroteo termina los muertos se entierran y los políticos entran en acción, y el resultado es siempre igual, una causa perdida…
- RAZA.- Así que, tu quieres la perfección o nada… ¡Ah! ¡Eres demasiado romántico, amigo! La revolución es como la más bella historia de amor, al principio ella es una diosa, una causa pura, pero todos los amores tienen un terrible enemigo, el tiempo. Tu la ves tal como es… la revolución no es una diosa, si no una mujerzuela… nunca ha sido pura, ni virtuosa, ni perfecta… Así que huimos, encontramos otro amor, otra causa, pero sólo son asuntos mezquinos… lujuria, pero no amor, pasión pero sin compasión, y sin un amor, sin una causa ¡no somos nada! Nos quedamos porque tenemos fe, nos marchamos porque nos desengañamos, volvemos porque nos sentimos perdidos, morimos porque es inevitable.”

‘Los Profesionales’ (Richard Brooks,1966)

lunes, 25 de mayo de 2009

La edad media disfrazada de terrario.

Hace poco me he enterado que a un programa de 'humor' de la televisión le han dado un 'prestigioso' premio -creo que suizo- al Mejor Programa de Humor para televisión.

A mi me gustaría saber quien da esos premios y si es la misma persona que dirige los designios de la cultura en España, pues, si es así, entenderé el despropósito.

El programa es 'El Hormiguero'. Es un programa cuya gracia está en lo fácil, en la hilarancia obvia, en esos chistes que cualquiera de más de dos años - los de menos simplemente no tiene lenguaje para expresar el chiste - lo haría en menos de tres segundos. También se dedican ha imitar esqueches de youtube o a hacer pseudociencia. También hacen ¡¡¿¿rap??!! y no se que idioteces más...

Bueno, la verdad lo he visto y sigo sin entender que ve la gente en el programa. Sólo supongo que quien lo sigue y tiene más de tres años, es porque se identifica con la capacidad de hacer chistes fáciles y bromas de mercadillo...

Pues eso, me parece un bodrio de mal gusto y peor guión o preparación.

Por otro lado he intentado entender por qué lo odio tanto, supongo que porque un sustituyó a mis amados Gomaespuma en las mañanas y ¡eso no se lo perdono a nadie!

sábado, 23 de mayo de 2009

Hace años. Hoy en día.

Hace años, un amigo que no hace mucho volví a encontrar, me comentó que era común - él escribía guiones, como yo intento - que los primeros guiones fueran sobre suicidios. No recuerdo muy bien la explicación, tampoco hoy me interesa demasiado. Pero es cierto que, durante mucho tiempo, en mi caso no sólo se cumplía el curioso hecho del tema del primer guión si no que era algo recurrente en mis ideas y mis pensamientos.

Hoy, viendo una película - no demasiado buena al principio, algo mejor en medio y peor al final - termina rompiendo una historia de amor con un suicidio, pues el protagonista dice haber alcanzado la felicidad máxima con dicho amor.

El final de la película no me ha hecho ni puta gracia, pero me he dado cuenta que mis ideas ya no van por el camino de mi primer guión.

Eso me ha hecho feliz.

miércoles, 20 de mayo de 2009

La radio.

Creo que era mi casi adorado L.G. Berlanga el que decía que cada día miraba - no se si cosa suya o heredado - las páginas necrológicas de los periódicos a ver si aparecía su nombre y, una vez confirmaba que no había fallecido, quedaba más tranquilo tomando el desayuno.


Esta chorrada la comento porque dos reseñas necrológicas en mi blog no son de mi agrado, si bien cuando alguien te duele en su desaparición debes recordarlo, pues como decía Woody Allen en uno de sus relatos 'Sin Plumas': "trascender a la muerte es el único consuelo que nos queda, aunque si me dan a elegir prefiero no morir"(o algo así...). Bueno, que ha muerto Antonio José Alés, alguien que hacia radio y, sobre todo, hacía que imaginara, que me escondiera bajo mis sábanas para huir de extraterrestres y fantasmas, que me costara trabajo dormir y que soñara y, por supuesto, que esperase con deseo la hora de 'Medianoche', como se llamaba su programa y la hora de emisión para dejarme llevar por su mundo.

Antonio, echaré de menos tu voz, como echo de menos la de 'Cebri', la del Doctor de ojeras,... y la de aquellos que hacen de la radio un nido de sueños.

Gracias abuelo por darme la radio y la cultura.