Nunca he entendido ni creo que entienda el por qué del arte, a pesar de las cientos de definiciones que han pasado por mis ojos y por mis oídos, si bien hay una de esas definiciones, que supongo que alguien alguna vez habrá usado, pero que a mi me gusta pensar que se me ocurrió a mi: El Arte como Tortura.
Ese es el caso de la persona que me enteré hace unas horas que había muerto: Antonio Vega.
Antonio, desde el punto de vista de alguien como yo que no soy fan suyo lo cual creo que me da la referencia y la objetividad para juzgarlo, fue alguien que sufrió y se dejó llevar por la melancolía y los excesos y los defectos de alguien que siente demasiado. El sentir demasiado duele en exceso y lo lleva a uno al refugio de la muerte rápida como ya hicieron y harán unos o su versión lenta basada en abusos y depravaciones químicas o físicas que hicieron, hacen y harán otros.
Pero Antonio ha dejado momentos de magia que forman parte de nuestras vidas, canciones que nos hacen sonreír recordando momentos propios o imaginar maravillosos y poéticos momentos de otros.
Antonio nos has hecho felices en la melancolía. Antonio ha hecho Arte siendo para él una Tortura. Antonio ha hecho música para él y para nosotros a partes iguales.
Antonio ha hecho historia y como una vez dijo alguien a quien la historia y la incultura tampoco hicieron justicia parafraseando a un genio, en España no sabemos enterrar a nuestros muertos, pero Antonio no necesita ser enterrado. Lo que enterrarán o incinerarán será algo que no es Antonio. Antonio es sus letras y su música que nos seguirán acompañando siempre.
Antonio, el Arte ha sido tu Tortura y tu tortura nuestra bendición.
Gracias y siento mucho tu sufrir.
http://www.youtube.com/watch?v=4xU12NYLj4k&feature=related
1 comentario:
Qué pena me ha dado a mí...
Publicar un comentario